Licia
Lacoviello

Licia Lacoviello
Italia - Varese
Biografía
Licia Iacoviello se licenció en Medicina y se especializó en Medicina Interna en la Universidad "Federico II" de Nápoles (Italia) y se doctoró en Epidemiología Genética en la Universidad de Leiden (Países Bajos). Se ha dedicado a la investigación en el campo de la trombosis y las enfermedades vasculares cardio-cerebrales, primero en el Consorcio Mario Negri Sur de Santa Maria Imbaro y después en el Centro de Investigación y Formación de Alta Tecnología de la Universidad Católica de Campobasso. Desde 2013 dirige el Laboratorio de Epidemiología Molecular y Nutricional, y desde 2019 el Departamento de Epidemiología y Prevención del IRCCS Neuromed en Pozzilli (IS).
Desde 2005 es profesora asociada de Epidemiología Genética en la Universidad de Buffalo (NY) en Estados Unidos y desde diciembre de 2016 profesora titular de Higiene y Salud Pública en la Universidad de Insubria, Varese, Italia. Actualmente es directora del Centro de Investigación en Epidemiología y Medicina Preventiva - EPIMED y de la Escuela de Especialización en Higiene y Medicina Preventiva de la Universidad de Insubria y del Centro de Big data y Salud Personalizada, en el Polo di Ricerca e Innovazione Neurobiotech, IRCCS Neuromed de Caserta.
Ha trabajado en el impacto de los genes y el medio ambiente y su interacción en el riesgo cardiovascular y en el papel de los hábitos dietéticos en el desarrollo de trastornos metabólicos, enfermedades cardio-cerebrovasculares y cáncer. Ha desarrollado una gran experiencia en la organización y gestión de estudios epidemiológicos, como estudios de cohortes multicéntricos, y en la organización de ensayos clínicos de suplementos dietéticos y alimentos funcionales en sujetos con factores de riesgo cardiovascular.
Desde 2005 coordina el Estudio Moli-sani, un gran estudio de cohortes en el que participan más de 24.000 personas adultas de edad, residentes en Molise, extraídas aleatoriamente de los registros municipales, con el fin de evaluar los factores de riesgo relacionados con el estilo de vida (especialmente la nutrición) y la genética para las enfermedades crónico-degenerativas y metabólicas y desde 2018, el Estudio PLATONE una red de investigación clínica para Big-data, machine Learning y salud personalizada.
En los últimos 20 años su actividad se ha dedicado principalmente a proporcionar bases científicas al efecto saludable de la dieta mediterránea y a entender los determinantes de la adherencia a la dieta mediterránea.
Ha sido miembro del Subcomité para la Prevención del Riesgo Cardiovascular del Ministerio de Sanidad italiano y actualmente es miembro del "Consejo Científico Asesor" del Departamento de Salud de la Población del Instituto de Salud de Luxemburgo.
Licia Iacoviello ha publicado más de 540 artículos científicos en revistas internacionales revisadas por expertos. La Academia VIA la ha incluido en la lista de los mejores científicos italianos, con un índice H de Scopus = 75 y 31 079 citas.
Desde 2005 es profesora asociada de Epidemiología Genética en la Universidad de Buffalo (NY) en Estados Unidos y desde diciembre de 2016 profesora titular de Higiene y Salud Pública en la Universidad de Insubria, Varese, Italia. Actualmente es directora del Centro de Investigación en Epidemiología y Medicina Preventiva - EPIMED y de la Escuela de Especialización en Higiene y Medicina Preventiva de la Universidad de Insubria y del Centro de Big data y Salud Personalizada, en el Polo di Ricerca e Innovazione Neurobiotech, IRCCS Neuromed de Caserta.
Ha trabajado en el impacto de los genes y el medio ambiente y su interacción en el riesgo cardiovascular y en el papel de los hábitos dietéticos en el desarrollo de trastornos metabólicos, enfermedades cardio-cerebrovasculares y cáncer. Ha desarrollado una gran experiencia en la organización y gestión de estudios epidemiológicos, como estudios de cohortes multicéntricos, y en la organización de ensayos clínicos de suplementos dietéticos y alimentos funcionales en sujetos con factores de riesgo cardiovascular.
Desde 2005 coordina el Estudio Moli-sani, un gran estudio de cohortes en el que participan más de 24.000 personas adultas de edad, residentes en Molise, extraídas aleatoriamente de los registros municipales, con el fin de evaluar los factores de riesgo relacionados con el estilo de vida (especialmente la nutrición) y la genética para las enfermedades crónico-degenerativas y metabólicas y desde 2018, el Estudio PLATONE una red de investigación clínica para Big-data, machine Learning y salud personalizada.
En los últimos 20 años su actividad se ha dedicado principalmente a proporcionar bases científicas al efecto saludable de la dieta mediterránea y a entender los determinantes de la adherencia a la dieta mediterránea.
Ha sido miembro del Subcomité para la Prevención del Riesgo Cardiovascular del Ministerio de Sanidad italiano y actualmente es miembro del "Consejo Científico Asesor" del Departamento de Salud de la Población del Instituto de Salud de Luxemburgo.
Licia Iacoviello ha publicado más de 540 artículos científicos en revistas internacionales revisadas por expertos. La Academia VIA la ha incluido en la lista de los mejores científicos italianos, con un índice H de Scopus = 75 y 31 079 citas.
Filiaciones
- Universidad de Insubria
- Universidad de Buffalo
- Centro de Investigación en Epidemiología y Medicina Preventiva - EPIMED
- IRCCS Istituto Neurologico Mediterraneo Neuromed
- Universidad de Buffalo
- Centro de Investigación en Epidemiología y Medicina Preventiva - EPIMED
- IRCCS Istituto Neurologico Mediterraneo Neuromed
Áreas de especialización
- Medicina interna
- Epidemiología genética
- Trombosis y enfermedades vasculares cardio-cerebrales
- Higiene y medicina preventiva
- Epidemiología genética
- Trombosis y enfermedades vasculares cardio-cerebrales
- Higiene y medicina preventiva
Abstract
Patrones de consumo y alimentación, hábitos de estilo de vida: De la evidencia científica a la aceptación pública
Drinking, eating patterns and lifestyle habits – From scientific evidence to public acceptance
For adults, a traditional Mediterranean Diet includes regular moderate alcohol consumption, preferably during meals, usually wine, consistent with the spirit of the ancient Greek word ‘symposium’.
The relationship between scientific evidence and public acceptance should consider three major components, that is robustness of the scientific evidence, level of understanding of the recipients and the means through which the message is delivered.
The misconception that even moderate alcohol intake is unhealthy stems from several shortcomings, including the context in which alcohol was analysed in some epidemiological studies—without considering dietary habits and drinking patterns. Other pitfalls include the classification of ethanol as a carcinogen, primarily based on experimental studies that cannot be directly extrapolated to humans, particularly when considering the importance of dosage or when accounting for the synergistic interactions between alcoholic beverages and nutrients.
Scientific evidence on the alcohol-health relationship is also generally delivered to the public by scientists/organizations who are not experts in the field, ending up with creating misinformation. The same applies to lay-press which often lacks scientific communicators.
The WHO is one of the staunchest supporters of the 'zero tolerance' policy towards alcohol, declaring as dogma that there is no safe amount that does not affect health. However, much of the evidence supporting this statement comes from observational studies, which have potential biases and limitations, as is acknowledged with strong criticism in the case of studies showing cardiovascular health benefits from moderate alcohol intake. This double standard principle also contributes to a lack of public understanding.
Furthermore, the general public may not always possess sufficient understanding of scientific methodology to actively participate in decision-making processes, such as discerning between associations and cause-and-effect relationships. Finally, benefits and risks of drinking change over a lifetime, and this should be clearly explained when dealing with the public.
References
For adults, a traditional Mediterranean Diet includes regular moderate alcohol consumption, preferably during meals, usually wine, consistent with the spirit of the ancient Greek word ‘symposium’.
The relationship between scientific evidence and public acceptance should consider three major components, that is robustness of the scientific evidence, level of understanding of the recipients and the means through which the message is delivered.
The misconception that even moderate alcohol intake is unhealthy stems from several shortcomings, including the context in which alcohol was analysed in some epidemiological studies—without considering dietary habits and drinking patterns. Other pitfalls include the classification of ethanol as a carcinogen, primarily based on experimental studies that cannot be directly extrapolated to humans, particularly when considering the importance of dosage or when accounting for the synergistic interactions between alcoholic beverages and nutrients.
Scientific evidence on the alcohol-health relationship is also generally delivered to the public by scientists/organizations who are not experts in the field, ending up with creating misinformation. The same applies to lay-press which often lacks scientific communicators.
The WHO is one of the staunchest supporters of the 'zero tolerance' policy towards alcohol, declaring as dogma that there is no safe amount that does not affect health. However, much of the evidence supporting this statement comes from observational studies, which have potential biases and limitations, as is acknowledged with strong criticism in the case of studies showing cardiovascular health benefits from moderate alcohol intake. This double standard principle also contributes to a lack of public understanding.
Furthermore, the general public may not always possess sufficient understanding of scientific methodology to actively participate in decision-making processes, such as discerning between associations and cause-and-effect relationships. Finally, benefits and risks of drinking change over a lifetime, and this should be clearly explained when dealing with the public.
References
- Trichopoulou A, Martínez-González MA, Tong TY, Forouhi NG, Khandelwal S, Prabhakaran D, Mozaffarian D, de Lorgeril M. Definitions and potential health benefits of the Mediterranean diet: views from experts around the world. BMC Med. 2014 Jul 24;12:112. doi: 10.1186/1741-7015-12-112. PMID: 25055810; PMCID: PMC4222885.
- Heath C, Lopez NV, Seeton V, Sutliffe JT. Blue zones-based worksite nutrition intervention: positive impact on employee wellbeing. Front Nutr. 2022;11(9):795387. https:// doi. org/ 10. 3389/ fnut. 2022. 795387.
- Trichopoulou A, Bamia C, Trichopoulos D. Anatomy of health effects of Mediterranean diet: Greek EPIC prospective cohort study. BMJ. 2009 Jun 23;338:b2337. doi: 10.1136/bmj.b2337. PMID: 19549997; PMCID: PMC3272659.
- Bonaccio M, Di Castelnuovo A, Costanzo S, Persichillo M, De Curtis A, Donati MB, de Gaetano G, Iacoviello L; MOLI-SANI study Investigators. Adherence to the traditional Mediterranean diet and mortality in subjects with diabetes. Prospective results from the MOLI-SANI study. Eur J Prev Cardiol. 2016 Mar;23(4):400-7. doi: 10.1177/2047487315569409. Epub 2015 Feb 3. PMID: 25648935.
- Barbería-Latasa M, Bes-Rastrollo M, Pérez-Araluce R, Martínez-González MÁ, Gea A. Mediterranean Alcohol-Drinking Patterns and All-Cause Mortality in Women More Than 55 Years Old and Men More Than 50 Years Old in the "Seguimiento Universidad de Navarra" (SUN) Cohort. Nutrients. 2022 Dec 14;14(24):5310. doi: 10.3390/nu14245310. PMID: 36558468; PMCID: PMC9788476.